viernes, 22 de octubre de 2010

Bogotá la bestia

Palabras de Viaje desde Colombia. (Torre de Babel, 2010)



A ésta ciudad le brota otra
desde sus adentros
a Bogotá
las calles le están estallando
su concreto reventado
es su fuente rota
las avenidas destrozadas
son su útero rasgado
las banquetas deshechas
son su matriz violada
llueve
a diario
placenta ensangrentada
A ésta ciudad le brotan
las entrañas
es la bestia
la cicatriz
la cortada
la puñalada
sangrante
saliente
entrante
punzante
purgante
la eterna herida
autoinfligida

La droga

Para Aurelio Meza

Lo difícil es empujar esa primera cerveza del día
ese primer whisky
esa primera cuba
ese primer tequila
ese primer vodka tonic
o ese primer trago
después de pasar
la madrugada anterior
empujando
todos
los tragos
posibles
empujando
todo el alcohol
probable
empujando
todos los licores
y todo el alcohol
en todas sus presentaciones
absorber
tragar
tragar
absorber

Lo difícil es inhalar esa primera bocanada
áspera de hierba en llamas
absorber ese primer polvo
sentir esa primera aguja atravesar la dermis
tragar la primera pasta electrónica
tomar esa primera dosis del día
después de pasar
la madrugada anterior
absorbiendo
todas
las dosis
de todas las sustancias tóxicas
posibles
absorbiendo
todos los enervantes posibles
todas las dogas probables
inhalar
absorber
absorber
inhalar



absorbiendo
tragando
inhalando
tragando
inhalando
absorbiendo
tragando
inhalando
la familia es una droga
tragando
inhalando
absorbiendo
tragando
empujando todos los tragos
absorbiendo
tragando
absorbiendo
tragando
inhalando
absorbiendo
el sexo es una droga
tragando
inhalando
tragando
inhalando
absorbiendo
tragando
el trabajo es una droga
absorbiendo
tragando
de todos los licores
absorbiendo
absorbiendo
tragando
inhalando
el conocimiento es una droga
tragando
inhalando
absorbiendo
inhalando todas las dosis
tragando
absorbiendo
tragando
absorbiendo
la poesía es una droga
absorbiendo
tragando
inhalando
tragando
inhalando
de todas las sustancias tóxicas
absorbiendo
tragando
absorbiendo
tragando
absorbiendo
la felicidad es una droga
absorbiendo
tragando
inhalando
tragando
el miedo es una droga
inhalando
absorbiendo
tragando
absorbiendo
tragando
de todos los licores
absorbiendo
absorbiendo
tragando
inhalando
el dinero es una droga
tragando
inhalando
absorbiendo
tragando
absorbiendo
el poder es una droga
tragando
absorbiendo
absorber
inhalar
tragar
la religión es una droga
inhalar
tragar
absorber
absorber
inhalar
tragar
inhalar
la vida es una droga
tragar
absorber
absorber
inhalar
tragar
inhalar
tragar
absorber

Al final nosotros
los humanos
somos
la droga.

Como monos

09/2010 Para M



dos faldas muy cortas
miradas en un caleidoscopio
mirada verde psycho killer
mirada de todos los colores
mirada donde arden los colores
encuentro de miradas que enciende las salivas
saliva caliente y espumosa
mi saliva caliente y espumosa
escurriendo
ardiendo
por tu cuello
tu boca abierta
tu lengua tensa
lengua punta de lanza
tu lengua de lava
la punta de tu lengua
la punta de mi lengua quiere escribirte
escribirte con la punta de la lengua
10000 poemas en tu pezón izquierdo
suave
suavecito y cada vez más esforzado
más urgente
valiente
muy valientemente
morder tu pezón izquierdo
embarrar mi rostros por tu pelvis
una y otra vez
una y otra vez
dos veces
treinta veces
muchas veces
en un baño
donde sea
que más da
en un baño
no me importa
en la calle
en la banqueta
en un árbol
como monos
recorrerte las piernas
tus piernas torneadas
bellas por violentas
violentas como tu mirada
caliente por verde violenta
embarrarme entre tus piernas
asfixiarme en tu cadera
ahogarme en tu vagina
recorrerme mil veces
hacia adentro
hacia fuera
de ti
de mi
no me importa
penetrarte
ser penetrada
donde sea
una y otra vez
dos veces
veinte veces
todas las veces
en un baño
donde sea
que más da
en un baño
no me importa
en la calle
en la banqueta
en un árbol
como monos
en un camión
en un lugar incómodo
en un lugar apretado
donde sea
otra vez
sin ropa
con ropa
¡No me importa!
como monos sudorosos
apareándonos
desesperadas
como sexos desesperados
desesperada
por tus piernas sobre mis hombros
lamerte
observarte lamerme
mirada verde de psycho killer
con tus muslos pegajosos en mis cachetes
apretados
muy apretados
mi lengua hurgando desesperada
dentro de ti
fuera de ti
en tu piel
en todos los dobleces de tu piel
mi boca contenedor
recibidor de tu placer vaginal
todas las veces
muchas veces
como monos
como monos apareándose
hacerlo como monos.
¡vamos a coger como dos monos!

viernes, 9 de abril de 2010

Crónica de una insensatez

Por arrebatarme las tácticas de seducción,
mi escalofrío diurno.
Porque no hay plumas en mi escritorio
ni una sola
Signo unívoco
de que su aliento
reside en la implosión
de todos los escalofríos
de mi última vida,
aquella que se duerme temprano,
se levanta tarde,
le gusta sorber del vaso,
beber de noche,
beber de día,
atascarse la boca de palabras,
de besos arrugados en un papel, en la basura,
de hojas con letras
que hablan todas con el lápiz labial
que aun despide ese aroma

(Escalofrío)

de donde se desprende
el aliento de todos mis escalofríos.

(Escalofrío)

De ésta, mi primera,
y mi última vida.

jueves, 8 de abril de 2010

Olvídame, sí puedes…

Yo veo el futuro
Y tú, tú con tu boca llena de casualidades,
Hombros al descubierto ardiendo de indecisión,
Tus manos mordiendo polvo de recuerdos
Dudas columpiándose en tus labios.
Tú puedes olvidarme

Aguardo en la esquina de algún bar /
Como niño castigado /
De cara a la pared /
Que has erigido, /
Sin mi consentimiento, /
Edificación de ansia y palabras huecas… /

Yo saldré a caminar por tu cuerpo
A pasearme con tu sombra,
Recobrando del ayer impulsos
Coqueteando con caricias perdidas,
Cortejando tus sueños.

Tú olvídame, olvídame. Si puedes…

Primer asalto

Subir la guardia
No pasan los besos

Subir la guardia
Ver asaltos escurrir

Subir la guardia
Estrenas sus labios

Subir la guardia
Ver entre rendijas

Subir la guardia
No hay paz
Subir la guardia
Imágenes entre coartadas

Subir la guardia
Haces la guerra

Subir la guardia
Con un ojo menos,

Subir la guardia
asustada.

Guardia ceñida
Aprietas cinturas
Piernas bailando la huida
Bailas
Líquidos calientes escurriendo
Se viene su puño,
Campana.

Golpe abre guardia
Golpe apaga luz
Golpe escurre en los líquidos
No hay guardia,
No hay guardia: hay golpes

Todo en un sólo round.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Humor

¿Alguna vez tendrá el humor de llamar?

El humor para saber
como caen las hojas en el aire
bailando con gracia arrítmica
o de las montañas que recuestan
su cabeza en la tierra para soñar
o del agua que mece los continentes
como la más dulce de las nanas.

Humor de expresarse
como el incendio que arrasa y que quema
y que destruye y que calcina,
como la nota disforme y mordaz y aguda
que irrumpe en la melodía perfecta,
como la mano que acaricia insistentemente
furtiva y fugaz y por debajo de la mesa.

Es mejor no escribir de humores de agua
ante una multitud enloquecida por la sed.
Es mejor no hablarle de humores de aliento
al oído de un desahuciado.
Es mejor no contarle de humores de placer
a quien se encuentra en un grave dolor.

¿Llamara el humor a tu puerta
una noche desaliñado y con insomnio de diez meses?
No lo sé, yo no sé de humores.

jueves, 18 de febrero de 2010

Femme Fatale

Resultan innecesarios los adornos,
Nimios contendientes versus su tez,
Cual seda grasienta
O casimir arenoso
Rondando ese cuerpo
Silueta imperfectamente bella
Surcada a suspiros ajenos
En todos sus ápices
Por la cadencia rotunda
De la forma que toma la belleza en su imperfección.

No es necesaria la estela de estrellas
Pálida cercenante,
Opaca entre sus piernas,
Senil en su boca
Precisamente elegida
De entre toda su forma
Para sorber el ocaso
Expulsando después un calor
Que transforma todo cuerpo en objeto incandescente.

Es suficiente el sudor en cascada frente abajo
Fusionando sus entrañas con nuestra carne,
Destrozando el verbo amar
En partículas diminutas
Capaces de ensañarse por los poros de la piel.

Es de sobra suficiente el rumor de su saliva
Secuestrado por la almohada,
Objeto inanimado rendido a tu rostro,
Y la sobrada manera de embarrar sus cabellos
Cuesta abajo en nuestros cuerpos
Obligadamente ciegos a tan femenina fatalidad.

viernes, 12 de febrero de 2010

Otra noche

No hay más alcohol,
Ojos turbios
De rabia mercantilizada.
Ojos no hay, no hay ojos.
Hay noche
Y siluetas.
Y todo lo que falta

Hay odios
Insomnio
Celos.

Una cama nublada espera,
Nos nublamos en ella.
No hay cama.

Sólo angustia allanadora de moradas.
Y unas ganas imposibles.

domingo, 7 de febrero de 2010

Aquella Poeta...

Se resiste a escribir directamente al ordenador
pues le causa una náusea de esterilidad.
No puede mirar precisamente a los ojos
porque le ocasiona un estupor infranqueable.
Evita llamar a las cosas por su nombre
ya que le produce una tristeza perpetua.
Le da pereza el amor
y le teme a la muerte
pero ansía morirse enfundada en el uniforme de un ejército revolucionario.