viernes, 9 de abril de 2010

Crónica de una insensatez

Por arrebatarme las tácticas de seducción,
mi escalofrío diurno.
Porque no hay plumas en mi escritorio
ni una sola
Signo unívoco
de que su aliento
reside en la implosión
de todos los escalofríos
de mi última vida,
aquella que se duerme temprano,
se levanta tarde,
le gusta sorber del vaso,
beber de noche,
beber de día,
atascarse la boca de palabras,
de besos arrugados en un papel, en la basura,
de hojas con letras
que hablan todas con el lápiz labial
que aun despide ese aroma

(Escalofrío)

de donde se desprende
el aliento de todos mis escalofríos.

(Escalofrío)

De ésta, mi primera,
y mi última vida.

jueves, 8 de abril de 2010

Olvídame, sí puedes…

Yo veo el futuro
Y tú, tú con tu boca llena de casualidades,
Hombros al descubierto ardiendo de indecisión,
Tus manos mordiendo polvo de recuerdos
Dudas columpiándose en tus labios.
Tú puedes olvidarme

Aguardo en la esquina de algún bar /
Como niño castigado /
De cara a la pared /
Que has erigido, /
Sin mi consentimiento, /
Edificación de ansia y palabras huecas… /

Yo saldré a caminar por tu cuerpo
A pasearme con tu sombra,
Recobrando del ayer impulsos
Coqueteando con caricias perdidas,
Cortejando tus sueños.

Tú olvídame, olvídame. Si puedes…

Primer asalto

Subir la guardia
No pasan los besos

Subir la guardia
Ver asaltos escurrir

Subir la guardia
Estrenas sus labios

Subir la guardia
Ver entre rendijas

Subir la guardia
No hay paz
Subir la guardia
Imágenes entre coartadas

Subir la guardia
Haces la guerra

Subir la guardia
Con un ojo menos,

Subir la guardia
asustada.

Guardia ceñida
Aprietas cinturas
Piernas bailando la huida
Bailas
Líquidos calientes escurriendo
Se viene su puño,
Campana.

Golpe abre guardia
Golpe apaga luz
Golpe escurre en los líquidos
No hay guardia,
No hay guardia: hay golpes

Todo en un sólo round.